domingo, 21 de septiembre de 2014

LAS SUPER ALBÓNDIGAS MAXINUTRIENTES!

ALBÓNDIGAS GIGANTES DE QUINOA, LINO Y SÉSAMO
(Plato crudiasado)



COMENSALES: 4
TIEMPO: 40 min
DIFICULTAD: Fácil



INGREDIENTES COCINADOS:
-          1 CEBOLLA
-          1 PUERRO
-          1 DIENTE DE AJO
-          1 RAMITA DE APIO
-          1 PIMIENTO VERDE
-          1 PIMIENTO ROJO O NARANJA
-          1 CALABACÍN
-          1 VASO DE QUINOA (en esta receta hemos utilizado quinoa roja, pero puede ser la blanca también)
-          1 CUCHARADITA DE CÚRCUMA
-          1 CUCHARADITA DE SAL MARINA O SAL DE HIERBAS
-          UNAS HOJAS DE ORÉGANO
-          3 CUCHARADAS SOPERAS DE ACEITE D EOLIVA VIRGEN EXTRA
-     ¼ DE VASO DE SEMILLAS DE GIRASOL TOSTADAS

INGREDIENTES CRUDOS:
-          1 CALABACÍN
-          ½ VASO DE SEMILLAS DE LINO (hay lino rojo y lino dorado, hemos utilizado el rojo, pero podría hacerse con el lino dorado)
-          ¼ VASO DE AGUA
-          ½ VASO DE SEMILLAS DE SÉSAMO
-          UNAS HOJAS DE PEREJIL FRESCO PICADO

EJEMPLOS DE SALSAS PARA ACOMPAÑAR:
-          Salsa Tahín: 3 cucharadas de tahín (pasta o crema de sésamo) + agua + cominos molidos (ir echando agua e ir removiendo enérgicamente hasta ir formando una consistencia de cremosa a tu gusto)
-          Salsa de tomate con aceitunas, ajo y orégano. Puedes hacer esta sencilla salsa triturando un par de tomates con ajo, una pizca de sal marina, orégano y aceite de oliva y añadiéndole unas cuantas aceitunas negras o verdes laminadas y sin hueso. También puedes utilizar una salsa de tomate casera cocinada. Lo que más te apetezca según estación y gustos.


*NOTA: si tostamos ligeramente el sésamo antes de molerlo le va a dar una sabor muy especial y realzado a la receta.
Los pimientos y calabacines han de ser de tamaño mediano, si son muy grandes añadir menos cantidad.



PREPARACIÓN COCINADA:
  • Mientras vamos a preparar las partes cocinadas, dejamos hierviendo la quinoa con agua durante unos 20 minutos.
  • Picamos muy bien: la cebolla, el puerro, el ajo y el apio. Rehogamos en 2 cucharadas de aceite a fuego suave-medio. Hasta que estén las verduras blanditas.
  • Picamos los pimientos y el calabacín, los añadimos al rehogado anterior, añadimos una cucharada de aceite y vamos removiendo.
  • Añadimos la cúrcuma, la sal y el orégano.
  • Acordémonos de retirar la quinoa que estaba cocinándose y colarle el agua sobrante, reservamos.


PREPARACIÓN CRUDA:
  • En un procesador de alimentos, batidora potente, molinillo de café o Thermomix tenemos que ir triturando los ingredientes por separado: primero las semillas de lino y reservamos, después las de sésamo y reservamos, por último el calabacín y reservamos.
  • El perejil podemos picarlo a cuchillo muy pequeñito.
  • Ahora mezclamos el lino con ¼ de vaso de agua, añadimos el sésamo y el calabacín (el calabacín es importante que esté muy bien triturado). Lo mezclamos todo muy bien…fijaos en la foto para ver cómo queda la masa, ha de quedar consistente.


PREPARACIÓN CRUDIASADA:
  • Ahora mezclamos la preparación cocinada con la cruda y añadimos la quinoa escurrida, las semillas de girasol tostadas y mezclamos bien.
  • Formamos albóndigas grandes, bien apretaditas, utilizamos las manos.










COMENTARIOS Y PROPIEDADES DEL PLATO:

Este plato me ha parecido muy diferente, se nota que está lleno de nutrientes esenciales porque es un plato que sienta fenomenal al estómago, además te deja saciado pero nada hinchado.
Respecto al sabor, me parece que las texturas son delicadas y suaves, en la foto podréis ver como hemos añadido la salsa tahín, a mi me parece que estaba muy acertada pero podéis hacer otro tipo de salsa que os apetezca más.
Me parece un plato práctico si tenéis por ejemplo quinoa hervida guardada de otro día y simplemente preparando los componentes en unos 25 minutos tendríais preparado este plato tan completo.
Ahora lo podréis leer pero la quinoa confiere una proteína de alto valor biológico, un 20% del grano es proteína, o sea aminoácidos. 
Muy recomendable que un par de veces a la semana la gente que tenga candidiasis se prepare platos a base de quinoa, este potente cereal-semilla que viene de la familia de las remolachas y fue conocido como "cereal madre".

LA QUINOA:

Quizás os podáis preguntar por qué la quinoa ha ganado tanta fama en estos últimos años…

¿Ha surgido de la nada de repente esta especie de “cereal” que no lo es?
Bueno, en realidad la quinoa ya estaba ahí desde hace muchísimo tiempo, pero estamos en constante redescubrimiento de nuestro propio mundo. La quinoa era y es conocida como “el arroz de los incas”, precisamente por ser el principal alimento de esta cultura ancestral.

Incluso la Nasa ha avalado los beneficios de la quinoa, integrándola en la dieta de los astronautas, especialmente para los vuelos de larga duración. Ya que la quinoa posee todos los aminoácidos esenciales (recordemos que las proteínas se componen de aminoácidos), múltiples vitaminas (B1 o tiamina, B2 o riboflavina, B3 o niacina, B9 o ácido fólico, vit C, E…), además muy rico en minerales (con casi tres veces más de calcio que el arroz y cinco veces más de hierro), potasio, zinc, manganeso, etc…

Muy interesante tomar quinoa cuando se padece de candidiasis ya que en ocasiones nuestro organismo puede padecer carencia de nutrientes y este es un alimento muy completo que nos va a ayudar mucho en esta labor de detoxificación y renutrición.

Pero además la quinoa nos surte de ácidos grasos omega 6 (ácido linoleico), entre otros ácidos esenciales.

Es también rica en fotoquímicos que previenen de enfermedades degenerativas y ayudan a nivelar el nivel hormonal de estrógenos en la época menopausia.

Si queréis saber más sobre las bondades de la quinoa:


EL LINO:

Se trata de una semilla muy rica en ácidos grasos poliinsaturados omega 3 (ácido linolénico) y omega 6 (ácido linoleico). Pero lo importante son las proporciones bien ponderadas que posee de ambos ácidos grasos que, si bien decimos que son esenciales, es porque necesitamos aportarlos con la dieta.

Esta ponderación es fundamental para el metabolismo de las prostaglandinas, que a su vez son las moléculas que regulan cosas tan importantes como la inflamación, el movimiento del calcio, la regulación hormonal, el crecimiento celular, las funciones y secreciones gastrointestinales, la función renal, etc…

EL SÉSAMO:

Sin duda una de las cualidades más destacables del sésamo o, también denominado, ajonjolí es el aporte de calcio que nos ofrece.

Para saber más no os perdáis este interesante artículo de la revista Discovery de Salud sobre el calcio, la leche y la leche de soja:



Autor: Vanesa Doménech

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.